[vc_row equal_height=»yes»][vc_column][vc_column_text]¿Qué son los riesgos psicosociales? Los factores psicosociales son aquellos factores de riesgo para la salud que se originan en la organización del trabajo y que provocan consecuencias de tipo fisiológico, emocional como ansiedad, depresión, alienación o apatía. Junto a las anteriores otras respuestas son de tipo cognitivo caso de la falta de concentración, de creatividad o de toma de decisiones; así como consecuencias en cuanto a la conducta de los trabajadores, por ejemplo el abuso de alcohol, tabaco u otras drogas. Todas estas consecuencias de los riesgos psicosociales con conocidas genericamente como estrés y pueden ser precursoras de otras enfermedades. El estrés, el acoso y el malestar físico y psíquico que sufren muchos trabajadores son resultado de una mala organización del trabajo. La Ley de Prevención de Riesgos Laborales considera que la organización del trabajo forma parte de las condiciones de trabajo que influyen en la salud y seguridad. Por ello, las características de la organización del trabajo deben ser evaluadas, controladas y modificadas.   ¿Cuáles son los principales riesgos psicosociales?
  • Exceso de exigencias psicológicas: ocurre cuando hay que trabajar rápido o de forma irregular, cuando el trabajo requiere que escondamos los sentimientos, callarse la opinión, tomar decisiones difíciles y de forma rápida.
  • Falta de influencia y de desarrollo: ocurre cuando no tenemos margen de autonomía en la forma de realizar nuestras tareas, cuando el trabajo no da posibilidades para aplicar nuestras habilidades y conocimientos o carece de sentido para nosotros, cuando no podemos adaptar el horario a las necesidades familiares o no podemos decidir cuándo se hace un descanso;
  • Falta de apoyo y de calidad de liderazgo: ocurre cuando hay que trabajar aislado, sin apoyo de los superiores o compañeros y compañeras en la realización del trabajo, con las tareas mal definidas o sin la información adecuada y a tiempo.
  • Escasas compensaciones: ocurre cuando se falta al respeto, se provoca la inseguridad contractual, se dan cambios de puesto contra nuestra voluntad,  no se reconoce el trabajo o cuando el salario es muy bajo.
  • Doble presencia: La organización del trabajo en la empresa puede impedir la compatibilización del trabajo remunerado y del trabajo doméstico, es decir es la falta de conciliación de la vida laboral y familiar. Las mujeres, en particular, siguen realizando y responsabilizándose del trabajo doméstico y familiar, por lo que la doble presencia es más frecuente entre este colectivo.
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